La pandemia que actualmente afecta a la población en general, especialmente en nuestro país, ha hecho que las personas usen otras formas de funcionamiento distintas a las que acostumbraban, haciendo que se transformen diversas actividades que se practican a diario, las compras dejan de ser presenciales, las oficinas yacen vacías para inclinarse hacia el teletrabajo y de igual manera, las aulas se han cerrado para comenzar un proceso de clases en línea.
De esta manera las actividades educativas se han convertido en pasar varias horas frente al computador, lo que para algunos puede ser más práctico, para otros se convierte en una pesadilla al no tener los medios necesarios para acceder a estas.
En este sentido, el preuniversitario llegó el 16 de mayo al consenso que las clases se realizarían bajo esta modalidad, por lo que se realizó una encuesta para saber las condiciones de conectividad que atravesaban tanto sus estudiantes como sus colaboradores voluntarios(as).
Esta arrojó como resultados que un 25,9% no poseía wifi con datos ilimitados y que solo un 59,2 % tenía acceso a internet todo el tiempo por medio de su teléfono. Lo que presentaba un desafío para quienes forman parte de esta comunidad, pues al no poseer los medios para ingresar a las clases online, se les dificultaría el hecho de poder prepararse para la prueba de transición.
A razón de ello, se gestionaron 33 becas de conectividad, que contemplan la entrega de un módem de 30 GB para 11 colaboradores y 22 estudiantes del preuniversitario. Esto significó una inversión de dos millones de pesos aproximadamente, reunidos con fondos del preuniversitario, conseguidos a través de diversas donaciones y de la unidad de Relaciones Estudiantiles de la UTFSM. Monto que buscó ayudar a quienes más lo necesitaban y seguirá ayudándolos en el transcurso del año.